Chechu nacio en Lomas pero se crio en Monte Grande. Fue -asi se recuerda a si misma- la cria curiosa que vivia leyendo libros, tras el por que de las cosas. “La exploracion con mi mismo cuerpo empezo an extremadamente temprana perduracion, de modo intuitiva. Era bastante sexual sin embargo acerca de eso nunca encontraba noticia en ningun lado”, cuenta. “El sexo fue invariablemente el eje de mi vida. Yo me sacaba un 10 en el colegio aunque estaba invariablemente buscando a quien besar, queria notar eso, porque cuando besaba a alguien me mojaba”.
Buscaba individuo a quien besar contra la tabique, a la semana siguiente a otro, “leia literatura inglesa erotica y me calentaba. Cuando comence la secundaria fue una trastorno, tenia las hormonas a mil, imaginate en mi hogar. me ponian bastantes limites”, sonrie, y se refiere a que sus padres venian de un villa de 20.000 habitantes de el interior de la provincia sobre excelentes Aires, y tenian, Cristalino “mente de pueblo”.